sobre monedas sociales

Una moneda “comunitaria”, o moneda social, es un tipo de dinero creado y adoptado de manera autónoma por comunidades para satisfacer sus necesidades de cooperación e intercambio. Esta no requiere el respaldo del estado, corporaciones u otras entidades. Actualmente existen y se utilizan miles de monedas sociales en muchas partes del mundo, incluyendo Brasil, Inglaterra, España, Corea del Sur y los Estados Unidos. Normalmente las monedas comunitarias no se utilizan como sustituto de las monedas nacionales o predominantes, pero pueden servir funciones financieras importantes al igual que ofrecer una manera de crear economías solidarias que no estén basada en principios de acumulación y lucro.

En la era de las monedas virtuales, como BitCoin, las artistas escogieron una moneda de papel que puede ser pasada de mano a mano para promover conversaciones comunitarias y para llamar la atención a la dimensión imaginativa de la producción monetaria. A diferencia de los billetes repartidos por el estado, los cuales son utilizados para fortalecer su autoridad y para ligarla a su capacidad de mantener el orden de forma coercitiva, los pesos de producción local señalan que la seguridad y autoridad se originan a través de relaciones sociales sólidas y en los actos de solidaridad por miembros de la comunidad trabajando juntos. 

Una de las razones por las que este proyecto ha desarrollado una moneda comunitaria es para desafiar la noción que las comunidades con poco acceso a la economía dominante son inherentemente pobres. Mientras una tasa de desempleo alta puede significar que a una comunidad se le niega acceso a productos o servicios globales, muchas de las comunidades tachadas como “pobres” son en realidad ricas en recursos compartidos que suelen ser subvalorados. Por ejemplo, sus miembros pueden poseer habilidades importantes en campos como construcción, medicina, o agricultura. Muchas de las comunidades “pobres” son además ricas si se toma en consideración la profundidad y calidad de sus relaciones sociales. Los pesos de Puerto Rico entonces ayudan a facilitar el intercambio de destrezas, recursos, relaciones y conocimientos de tal forma que benefician a regiones y comunidades. 

Información General para Crear una Moneda Social

Periódicos

Estudios en profundidad

En Japón, se implementaron más de 600 sistemas de monedas comunitarias para 2003. Este artículo brinda un análisis detallado y la historia de estos sistemas y ofrece un modelo para abordar los problemas sociales en Europa y los Estados Unidos a través de un sistema económico orientado hacia la comunidad.

Hallsmith y Lietaer ofrecen una guía sobre cómo implementar sistemas de monedas sociales.

Este artículo investiga sobre cómo distintas monedas sociales ofrecen modos sustentables de financiar un desarrollo económico nacional y propone esta herramienta como alternativa al endeudamiento con otros países, una táctica que crea relaciones de explotación entre regiones.

Centrándose en cuatro tipos de monedas comunitarias (créditos de servicio, intercambio mutuo, monedas locales y mercados de trueque), este artículo explora las monedas comunitarias en todo el mundo y cómo éstas informan la política ambiental y el desarrollo sostenible.

Este estudio de una moneda social de banco de tiempo investiga las diversas dinámicas sociales que se crean en el sistema de moneda social.

Aldrich y Meyer critican los enfoques para la recuperación de desastres y llaman la atención sobre el papel del capital social en el fomento de la colaboración y la resiliencia de la comunidad. Recomienda las monedas comunitarias como un medio para revitalizar las economías locales después de un desastre.

Luego de investigar veinte monedas comunitarias diferentes, Sobiecki analiza las fortalezas y debilidades de las diferentes formas de moneda social y destaca que dos sistemas fueron particularmente impactantes y duraderos.

Nishibe rastrea el desarrollo de varias monedas comunitarias que se implementaron para mejorar diversos problemas económicos, sociales y culturales causados por la globalización y la desindustrialización en la economía capitalista moderna.


Crédito de foto de portada: José Rosario